La previsión para la jornada era de muy poco viento y efectivamente el viento escaseó aunque no tanto como pensábamos. Para empezar el comité aplazó la salida y Marije y Félix, que ya había navegado en el Emilu de vuelta de Gijón, aprovecharon para darse un chapuzón. En cuanto saltó el viento el comité preparó un recorrido barlovento sotavento, dos vueltas, con la boya de barlo a dos millas, y con la entrada junto al RCMA-RSC después de completar un triángulo en el Abra interior.
El viento fue cayendo poco a poco. Después de alcanzar por segunda vez la boya de barlo veíamos los spis de los J80 avanzando muy lentamente hacia la playa de Ereaga. Al desaparecer el último "jota" viendo imposible completar el recorrido en un tiempo prudente, llamamos al comité para anunciar que emprendíamos el regreso a motor. ¡Una pena, después de tantas horas tratando de aprovechar hasta la más mínima racha!
La entrega de premios, se realizó con una grandísima presencia de participantes, que agradecieron a Iberdrola su patrocinio. El trofeo, por cuarta vez, fue un éxito en lo deportivo, con una gran afluencia de barcos, y en los actos sociales. Sin duda que la mejor publicidad para Iberdrola será el boca a boca que trasmitiremos los participantes durante todo este año en que estaremos esperando con ansia la celebración del 5º trofeo.
Silvia, en representación de Iberdrola, patrocinador del Trofeo, dirige unas palabras de agradecimiento a los participantes, a la organización y al RCMA-RSC
Algunas instantáneas de la jornada del sábado durante el refrigerio ofrecido por Iberdrola a los participantes, con unos excelentes "mojitos", canapés y pastelitos.
Las bolas de luz flotantes en las piscinas, la noche, la Luna, la música, la compañía... crearon un escenario espléndido que casi nos recordaba las mejores noches de verano del Mediterráneo