A las 10:30 estamos en el pantalán, Lucio, Edu, Néstor, Álvaro y Julián. Vaciamos el barco, ponemos las velas y vamos hacia San Ignacio para la salida. A la vista de la ola el comité la anuncia en el abra interior, para el siguiente recorrido: salida, boya de San Ignacio por babor, boya roja cercana a la segunda roja por babor y baliza de salida, dos vueltas para la clase C y tres para A/B.
La salida se da puntual, y algunos barcos llegan justo, tan justo que lo hacen con el motor en marcha una vez dada la salida. En ese momento la situación no se parece en nada a las predicciones: el viento es flojo, de componente este, y no hay mucha ola. La salida es un poco extraña, con el Emilu por delante del Maitena. Desde el faro nos saludan Javi (Haize Lore) e Iñaki (antes del Sandra).
Saliendo del abra el viento va arreciando y rolando al norte noroeste. Cerca de la boya de barlovento la ola efectivamente es grande, y la navegación incómoda. En la bajada no ponemos spi, sino que atangonamos génova y vamos a orejas. La ola hace difícil la labor del patrón, y hay que hacer muchos cambios en la posición de las velas.
En la segunda subida, cerca de San Ignacio, llega un chubasco y el viento llega a los 36 nudos. El barco se hace ingobernable. Conseguimos enrollar el génova y nos volvemos. Pero el chubasco pasa, la cosa se calma, y decidimos seguir en regata. La cosa va bien, pero se ve llegar otro chubasco. Calculamos que nos pillará en la empopada y seguimos adelante. Efectivamente, a la altura de la torre de salvamento marítimo se desencadena un mini huracán que una vez más convierte el barco en ingobernable. Sotaventados por la torre recuperamos el dominio del barco, y logramos terminar sanos y salvos y sin romper nada.
Para reponernos de los sobresaltos nos tomamos un par de vemos, lo que anima a Edu, Néstor y Álvaro a seguir navegando en el Sandra.
Hay gente pa tó |
Días después tenemos conocimiento de que acabamos terceros! (Yuju!)
ResponderEliminarBonita crónica!