Nos embarcamos a eso de las 11 y después de la obligada lección básica de seguridad, de vocabulario naútico y después de aparejar partimos hacia Castro.
Sin viento, a motor, fuimos avanzando. Al llegar al cajón, los molinos eran testigos inmóviles de nuestro paso. Aitzi comenzó a marearse, tomó el relevo a Jorge en la caña y nos llevó con gran seguridad hasta la bonita ciudad de Castro sin desfallecer. Allí, nos abarloamos al Bao, después de pedir boya y de que nos la negaran. Desembarcamos y nos juntamos con Gari, Eider y Udane.
Dimos buena cuenta del pulpo, rabas, cerveza, marianito, mosto etc.
Después regresamos al club donde comimos. Marije y Julián encantados con Udane no pudieron resistirse a sus encantos y posaron con ella, tal y como las fotos lo atestigüan.
Tras la sobremesa, de nuevo en el barco, sin viento pusimos proa a Bilbao. A llegar al superpuerto saltó el viento (10 nudos del norte) así que izamos velas y ya sin el motor pudimos disfrutar, algo más de una hora, del placer de navegar a vela en el Emilu. Izamos el spí, trasluchamos, volvimos a trasluchar...
En pocas palabras, que disfrutamos de un muy bonito día.
Esperamos volver a veros por el Emilu a Jorge y a Aitzi y a Gari, Eider y Udane en Castro :-)
¡¡Qué bien que pudísteis navegar a vela!! Intuyo que Aitzi tuvo una mejor vuelta.
ResponderEliminarNosotros agradecidísimos por la visita. Estuvimos muy a gusto y disfrutamos mucho.
Las fotos muy chulas ;-)
Por aquí estaremos hasta final de mes, con nuestras raciones de pulpo (no Paul, que acertó, Joselu!!!)
Gari