Lucio, Edu y Álvaro salimos este sábado para disputar la tercera regata. Lucio y Edu tienen unas sanas agujetas tras haber haber disfrutado el viernes esquiando. Nada más salir nos encontramos con la bella Sandra que se prepara para dar unos bordos libres.
A la altura de la farola del contramuelle coincidimos con el remolcador Galdames, que amablemente nos cede el paso, y al tiempo las traineras de Portugalete entrenan junto al puerto.
Da la sensación de que hay una gran calma, pero ya pasada la torre de control sentimos que la mar está agitada, como si hubiese tenido una noche ajetreada tras el eclipse parcial de luna llena de la pasada madrugada. Continuamos a motor hacia Punta Galea, y vemos cómo escoran los barcos que ya se encuentran en la zona donde se prepara la línea de salida. La mar está revuelta, con olas montadas y cruzadas, pero por lo menos hay unos 15 nudos que vienen del 50º, por lo que podremos quitar el miedo al mareo, ya que sin viento sería duro de pelar estar en estas condiciones esperando por aquí.
"Arranchamos" el barco para la previsible zurrilla poniendo un rizo y recortando la génova hasta los obenques, y entre la operación, y como al comité no se le oye suficientemente por la radio, salimos un pelín retrasados respecto a la flota, y a la contra de casi todos ellos, pero hacemos un rumbo majo, por lo que seguimos bajando hacia un 90º aproximadamente.
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Pesquero de Santurtzi rodeado de gaviotas |
Tras una virada tomamos un largo bordo hacia el norte, que es algo más incómodo porque la ola viene de frente pero Lucio la va sorteando habilmente. Tras otra virada que casi nos dejará en un bordo de rumbo directo, nos vamos acercando a la boya. Los barcos más grandes han puesto spi, y también lo hace el Urbegi que sufre varias fuertes tumbadas y deciden recogerlo. Tomamos la boya, desplegamos toda la génova e izamos toda la mayor quitando el rizo. La vuelta nos llevará en una larga empopada hacia el Abra
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Viento en popa junto a Punta Galea |
Junto a los acantilados de La Galea nos sotaventamos un poco, pero aguantamos con la inercia que nos proporcionan las rachitas intermitentes, las ola de popa y la pleamar. El viento se pone rolón entre aleta y amura de babor, lo que nos obliga a ir adaptando la tensión de las velas. ¡Está entretenida esta regata!
En la zona interior el comité ha decidido colocar un triángulo de llegada. Nos cuesta ver la segunda boya, es pequeña y está cerca de la playa de Las Arenas, y cuando nos aproximamos a ella escuchamos a nuestra popa unas enérgicas voces de mando ¡el pujamen, el pujaaamen!! ¡Es el Simphony, que tras tener que hacer otra vuelta en Punta Galea y con afán de dar caza al Maitena se nos echa encima! Por un momento parece que nos encontramos navegando en el Golfo de Bengala y sentimos cerca el genio del Tigre, cuyo spinnaker pasa a dos zarpas de nuestra cruceta
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Las garras del Simphony |
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¡cómo apura el Tigre! |
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Akelarre persiguiendo al Tigre |
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Buscando el mejor rumbo, detrás el Gaitero |
Con las malas condiciones que nos hemos encontrado antes de la salida no imaginábamos que íbamos a disfrutar tanto esta regata, pero hemos vuelto muy satisfechos. Una pareja de simpáticas alcas hacen un aleteo de despedida.
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Alcas en el Abra |
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Eskerrik asko Emilú! |
Qué bien que lo "pasemos", oyes.
ResponderEliminarPreciosa crónica. Ya tengo ganas de la siguiente!! (Jijiji)