...he encontrado a Txantxar, cansado, muy cansado, sentado en la silla. Esta mañana ha trabajado con el logopeda y a la tarde, media hora de rehabilitación. No le apetecía hablar. Su madre animada como siempre. Y sus amigos acompañándole y animándole. Una tarde preciosa. Desde el hospital, la bahía espectacular, el mar tranquilo y el cielo con más claros que nubes, buena señal. Me despido de Txantxar y veo la gratitud en su mirada.
23/02/2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Qué poético. Me gusta, tanto la redaccion como la foto
ResponderEliminarBesos