01/08/2013

XVIII regata El Gaitero. Día 1

El 31 de julio, día de San Ignacio, Gure Patron Aundia, se dió la salida a la XVIII regata El Gaitero, en la que el Emilu participa por decimosexta vez (en número 16 veces). No pusimos todas las banderas en el barco porque no caben.
El día anterior fue la pesentación en el RCMARSC, con sidra y pinchos como para saciar a 50 trpulaciones.
Tras la crónica de Pepelu desde tierra, va la mía desde el mar.
Tripulación de la primera prueba: Marije, Mikel, Álvaro, Néstor y Julián
La salida se dió puntual a las 13:05 en la zona de la Galea, con una boya de desmarque a una milla a rumbo 50º. Salimos bien, por el medio, en la popa del Gaitero. En la boya nos pasa por proa el Red Devil y tenemos que repicar para poder tomarla. El viento es abundante, y el rumbo a Cabo Ajo un través. Los que tienen asimétrico van bien, pero vemos al Ramper y a la Marmotiña pasar apuros con el spi, y además hacen rumbo a tierra. Decidimos ganar algo de barlovento e izar spi más tarde.
Marmotiña (spi azul) y Katxiporreta (spi rosa)
A la altura de Castro abrimos un poco el rumbo e izamos spi. A partir de ese momento vamos a un rumbo fijpo, con el viento por la aleta a 120º y un aparente entre 10 y 15 nudos. Aprovechamos para comer, beber y darnos crema. El día promete.
Disfrutando del día
En Cabo Quejo tenemos un momento de desconcierto. El viento cae y el poco que sopla no se sabe de donde viene. El Ramper y el Horta salen hacia fuera y parece que encuentran más viento. Tras 25 minutos vuelve el viento, y pasamos los cabos.
En la playa de Langre nos llega el siguiente momento pánico. El viento rola al oeste y sube de intensidad. Nos vemos navegando de vuelta a Getxo a buena velocidad. Desconcertados tardamos en sacar génova y arriar spi, y cuando ponemos rumbo a Santander estamos otra vez al principio de la playa, perdiendo un tiempo precioso y dando oportunidad al Ramper de irse.
Si hasta aquí todo había sido empopada, a partir de ahora es ceñida pura y dura, con aparente por encima de 20 nudos. Bordo tras bordo, cruzamos la línea de llegada tras 7 hora 4 minutos, justo por detrás del Sigmos y el Imposible, que nos adelantan ya dentro de la bahía. La regata más rápide que yo recuerdo. Quedamos 14 en nuestra clase y 41 en la general.
En el puerto no hay ni boyas ni amarres. Los barcos se amarran como pueden al pantalán de hormigón a la entrada de Puerto Chico. Nos abarloamos al Imposible, donde están Lucio y Elena esperándonos.
Suerte para la segunda etapa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario